Los Rack por gravedad funcionan siguiendo el método Fifo para piezas pequeñas, o bien para embalajes de cualquier dimensión. Para ello, las vías de rodillos se encargan de que la mercancía almacenada avance hasta el punto de recogida de forma automática. Esta secuencia estricta hace que no haya nada antiguo en el almacén de transición. Este tipo de almacenaje realmente compacto garantiza trayectos muy cortos en la preparación de pedidos. Una clasificación clara contribuye además a evitar errores.